Potasio: Hipopotasemia y sus síntomas

¿Qué es la Hipopotasemia?

La hipopotasemia es una condición médica caracterizada por niveles bajos de potasio en el cuerpo.

El potasio es un electrolito necesario en numerosas funciones vitales (metabolismo celular, equilibrio ácido-base y presión osmótica, síntesis de proteínas y glúcidos y sistemas de transmisión neuromuscular).

La cantidad mínima diaria necesaria es de 0.5 mg./kg. de peso que se ve cubierta totalmente con el aporte habitual diario a través de la alimentación.

La principal ruta de absorción del potasio en el organismo es la intestinal, la cual no va a estar sometida a ningún control específico. El 98% del total del potasio del organismo se encuentra en el espacio intracelular, y dentro de este nutriente clave, la mayor parte se encuentra en las células musculares (75%), aunque también existen cantidades importantes en células hepáticas y eritrocitos (5% del total).

El nivel bajo de este mineral vital en la sangre es una afección en el cual el nivel de este electrolito esencial en la sangre está por debajo de lo normal. El término médico de esta afección es hipocalemia.

Consecuencias de la falta de potasio:

  • Gran consumo de laxantes o diuréticos
  • Gran consumo de regaliz o de tabaco de mascar
  • Problemas hormonales (Hiperaldosteronismo)
  • Problemas metabólicos de origen renal
  • Hipertensión Arterial Maligna
  • Insuficiencia cardíaca.
  • Síndrome de Cushing (Exceso de glucocorticoides)
  • Síndrome paraneoplásico
  • Tratamiento intenso con algunos antibióticos.
  • Vómitos o diarreas intensos

Síntomas de la hipopotasemia

  • Diarrea o vómito
  • Trastornos alimentarios (como la bulimia)
  • Hiperaldosteronismo
  • Uso excesivo de laxantes, lo cual puede causar diarrea
  • Enfermedad renal crónica
  • Nivel bajo de magnesio
  • Sudoración
  • Trastornos genéticos, tales como parálisis periódica hipocalémica, síndrome de Bartter

El exceso de Potasio también da problemas: Debilidad muscular, parada cardiaca.

Alimentos con más potasio

Las cifras son en miligramos de este nutriente clave por cada 100 gramos del alimento:

  • Garbanzos 1.200 mg.
  • Almendras 700 mg.
  • Acelgas, espinacas, 600 mg.
  • Plátano 400 mg.
  • Pescado blanco (merluza) 300 mg.
  • Carnes 300 mg.
  • Tomate 270 mg.
  • Yogur 190 mg.
  • Leche 150 mg.

También se incluyen los siguientes alimentos:

Alcachofas, apios, champiñones, coles, coliflores, endibias, escarolas, lechugas, puerros, zanahorias y en general todas las legumbres y frutos secos, dátiles, albaricoques y aguacate.

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